lunes, 23 de noviembre de 2015

Tiempos pasados, tiempos futuros, Tiempos....





Pasa la vida volando, vuelves la vista atrás y surgen las añoranzas de aquellos tiempos, tiempo de velar el sueño de tus pequeños angelitos, contemplar
 sus pequeños rostros, tranquilos, sus apacibles caritas contra la almohada que alberga el mundo mágico de sus sueños. Una sonrisa de satisfacción asoma en mi rostro mientras, ya relajada, me sumerjo en mi propio mundo onírico. El tiempo, implacable, sigue corriendo, se te cuela entre las manos, cual agua que no puedes retener y ese agua que antaño humedecia tus manos se secó, dejándote soledad en la piel, piel seca de abrazos, de olores tiernos.
Se me secó la piel, abrasada por los tórridos vientos repletos de añoranzas, se me seco el alma
....
No es cierto. No te engañes. El Alma no se seca, sólo se replega sobre sí cuando te olvidas que ella es tu propia esencia, cando te pierdes en las fracciones del tiempo y te dejas arrastrar por la confusión de pensamientos y sentimientos preñados de culpas y prejuicios. Ella se alimenta de lo bello, presente y pasado. Ella crece con el amor que anida de lo que fue, de lo que es, y lo que será. No la ancles en lo que fue, porque ya no es. No pongas el plomo de tus tormentos en sus alas. Empuja su vuelo con fuertes vientos y que los alíseos la conduzcan hacia la libertad.

2 comentarios:

  1. Me gusta , lastima que no lo hagas mas seguido, espero verte por aqui en muchas mas ocasiones , aportando tus experiencias

    ResponderEliminar
  2. Gracias. Después de tanto tiempo en silencio prometo salir de nuevo al ruedo, engrasar los ejes de mi carreta y recorrer los caminos de cuentos y relatos que la imaginación tenga a bien inspirarme.

    ResponderEliminar